Controlé la sensación de agradecimiento y ese dejo de encerrarme a derrumbarme.
—Gracias, pensé que me odiaban.
—Jamás, señor. No era agradable verlo tan indiferente para con la señora y ahora que sabemos todo lo comprendemos, me pareció algo tonto su arcaico punto de vista, sin embargo, su padre es de otra...