Después de conducir unos 30 minutos más, estamos aparcando el auto en un estacionamiento desierto debajo de un enorme edificio, ella frunce el ceño y susurra
– ¿Dónde estamos? – pregunta con la curiosidad dibujada en cada centímetro de su hermoso rostro
– ¿esto? – Pregunto apagando el motor del auto, ella...