Mia Redford
Presbyterian Hospital, New York.
“Michael” susurré su nombre, pero no escuché una respuesta. “Michael” volví a llamarlo, pero solo había silencio. Cuando abrí mis ojos, me exalté al ver que no estaba en nuestra habitación del ático, él no estaba a mi lado, cuando intenté levantarme, no podía, estaba demasiado...