Hermes bebió del vino en la copa con normalidad, y no distinguió nada extraña. Al contrario, tenía un buen sabor.
—¿En serio? —preguntó Hermes; las bebidas no era uno de sus hobbies preferidos.
—No es por presumir, pero soy especialista —dijo Marianne con confianza.
—Está bien, pero no le digas. Es un buen...