—¿Hola, Rachel? Solo estoy tomando unos tragos. ¿Quieres algo de Costa?
—Organicé un café y un plato de la tarde para ser entregados desde la panadería —me informó Rachel. Parecía distraída y el ruido de fondo no sonaba como si estuviera en la casa de Belgravia donde se suponía que me...