Ambos marcharon hacia la sala de juegos, antes Max se detuvo para hacer varias llamadas. Necesitaba obtener respuestas de Joel, es lo único que necesitaba por el momento para poder tranquilizar su mente.
-¿Todo está bien?, preguntó ella y él asintió.
Max estaba a centímetros de ella, su aroma lo enloquecía... jamás...