—¡¡¡¡Aaaaahhhhhhh!!!! —dejé que todo el aire saliera de mis pulmones en pleno grito, la azotea del hospital era el lugar perfecto para eso, eliminar mi frustración de una buena vez.
Todavía podía sentir las palabras de Lizy en mis oídos.
“—Basta Caroline, soy una adulta y no necesito tener tu permiso para...