Punto de vista, Kathe...
Me sentí muy inquieta, había terminado de desayunar, y mi esposo aún no había vuelto con nuestro hijo, eso me molestaba mucho, y más aún porque no sabía dónde había dejado mi teléfono para llamarlo...
Escucho que se abre la puerta, es Alek con unas enfermeras, y él...