Continuamos nuestro camino hacia el techo de la mansión. Una vez en la puerta que da hacia ella, miro a Claus que sonríe con malicia.
— ¿Cómo lo harás? — pregunta con curiosidad.
— No quiero perder mucho tiempo…— Claus frunce el ceño.
— Vamos diviértete con el tipo…— me pide —...