—Entonces, que comience el juego.
—¿Qué tienes planeado? —preguntó Heros, mientras deslizaba sus manos por la espalda de Hestia.
Heros la acercó más hacia él; ansiaba sentirla, tocarla y degustar el aroma que emanaba de ella, como si fuera un adicto que necesitaba la dosis de su droga, para poder calmar sus...