Los días pasaban y se convertían en semanas. Hestia y Heros detuvieron sus encuentros furtivos, sus besos y sus caricias, para actuar como dos desconocidos.
—Señor Deale, cambie este informe —dijo Hestia, con voz severa y expresión despectiva hacia Heros—. Puede ser mejor.
—Como ordene, señora Haller —contestó Heros, con su mirada...