Aslan Murabak
Sabía que las cosas iban a ser difíciles, pero no imaginaba hasta qué punto. Ahora mismo, mi mujer, a la que tanto quería, y su padre están en casa de mi padre, esperándome. Mi teléfono sonó en cuanto entré en el coche.
'Tenemos que hablar, Aslan Murabak, tú como jefe...