Diana Rodrigues
Estoy sentada dentro del avión privado de la familia Murabak, rodeada de una atmósfera de incertidumbre y miedo. A mi lado están Joseph, mi fiel amigo y confidente, que viene a recogerme, y Lemi, que comparte conmigo la angustia y la incertidumbre. Un pesado silencio se cierne sobre nosotros...