Horas más tarde, al llegar a Dubái, Basima recibió a su nieta en la entrada del palacio, su andar era cada vez más lento, con lágrimas en los ojos la saludó con un tierno beso.
— As-salamu alaikum, hafida (nieta).
—Wa-alaikum as-salam, jida (abuela).
Farh sentía una profunda tristeza al saber que su...