Kai Metzler.
No pude resistirme, no cuando la tengo tan jodidamente cerca mirándome como lo hace, sé que ni lo nota, pero sus ojos constantemente me devoran y desvisten, como ¿resistirme a eso, a ella? Es simplemente imposible.
Deslizo mis dedos sobre la piel de sus piernas hasta alcanzar sus tobillos donde...