Mi ceño se frunce y me pongo alerta, estoy segura que lo llevaba anoche, entonces caigo en cuanta, Kai me lo quito. Frunzo el ceño y me pongo en pie de golpe.
— Disculpe señora Isabella
— Isabella cariño...— me interrumpe mirándome seria — ¿sucede algo?
— Si, necesito encontrar mi teléfono y...