Alarico despertó, viendo a Dolores de cinco años con una gota de sangre en su dedo, lágrimas adhiriéndose a sus pestañas, observándolo con tristeza no muy lejos de él.
¿Fue desde ese momento?
Antes de que naciera Dolores, todos esperaban ansiosos su llegada. Alarico también quería una hermanita. Cuando su madre yacía...