Hogar
—Quizás deberías haberlo hecho, pero nunca te habrías perdonado a ti mismo. Tomaste las decisiones que tomaste por el bien de la manada, incluso si nos hirieron. Si los hubieras dejado, él nunca habría relinquido el control, y ellos seguirían sufriendo. Los destinos tenían un plan, y tal vez irme...