Golpeo la puerta, pero esta no abre.
Esto tiene que ser una broma, se supone que vendría por Chanel, me iría de aquí y no miraría atrás.
«¿En serio?» Susurra mi cabeza y hago una mueca.
Muevo el pomo, pero es inútil, la cosa no cede.
—Dime, ¿quieres tu filete término medio o hecha?
—¡Ninguna...