—¿Y para cuando la boda? —me sonríe.
—Aun no le he pedido que sea mi novia, quiero que sea algo verdaderamente especial, que sea lo primero que recuerde cuando estemos viejos y le cuente a los nietos.
—¿Y ya tienes ideas o necesitas ayuda?
—No tengo idea, pero no quiero la ayuda, no...