Respirando profundamente, Rocío recogió la comida intacta y la tiró a la basura.
Elizabeth había estado viendo toda la escena desde la cocina y no pudo evitar sentirse mal por Rocío.
Caminando hacia Rocío, tomó el plato en la mano de Rocío y le dio unas palmaditas en la espalda.
—No se tome...