Rocío se animó en el momento en que sus ojos se posaron en la figura alta e imponente de Chris.
'¡Dios mío! Lo extrañe.'
Ajena a su ira, trotó hacia él y saltó sobre él, envolviendo sus manos alrededor de su cuello y rodeando sus piernas alrededor de su torso.
—¡Te extrañé esposo!...