Gina, abrumada por una intensa sensación de vergüenza, hizo un esfuerzo sobrehumano por apartar la mirada de esa loba, cuyo cuerpo estaba completamente desnudo. Sus pies parecían enraizados en el suelo y no sabía qué hacer.
—¿Por qué me haces esto después de invitarme a tu habitación? Luego me tratas mal,...