••• Punto de vista de Arabella •••
"¡Suficiente!" Marcos le rugió al rubio, que todavía intentaba decir algo, y volvió a golpear la mesa con el puño.
A pesar de su enojo, Marcos todavía me pasó el brazo por el hombro, ofreciéndome apoyo y aliento.
Sintiéndome conmovida por su acción, le sonreí agradecida.
Por...