Seve Gonzalo extrañaba la manera en que ella se comportaba como una dama.
Le lanzó una mirada subconsciente a Nohemi Begas y notó el rubor en su rostro; de repente, toda la depresión y la incomodidad en su corazón desaparecieron, como si el tiempo hubiera retrocedido cinco años, hasta aquella Nohemi...