Nohemi sintió la respiración especial de Seve y se sintió incómoda. Quería liberarse de su brazo, pero Seve dijo:
—He visto tu diseño. Es muy parecido al concepto de un coche que quiero. Yo también diseñé uno. ¿Quieres probarlo?
Las palabras de Seve dejaron en silencio a Nohemi. A ella le gustaba...