Escuchar esa petición provocó que Arnaldo perdiera los estribos y los celos se adueñaran del momento. ¿Acaso él quiere separarse de ella?
—¿Qué dices? —cuestionó.
—Ya no quiero continuar con esta vida de mierda que vivo a tu lado. Quiero regresar al lugar que pertenezco, junto a mi abuelo. Allá soy...