Christian resopla furioso, su nariz se infla de una manera que asusta. Lo veo como aprieta sus manos, aguantándose de no cogerla por el cuello.
—¡Muy seguro, señora! —Repite y se le acerca amenazante, ella retrocede un poco pero sin dejar de desafiarlo. —¡Porque yo fui el primero y soy el...