Punto de vista de Michael
Mientras subía las escaleras hacia la oficina del Alfa, vi a Rosalía y Alejandro saliendo. Me sorprendió verlos salir de su oficina; espero que nadie esté sangrando otra vez. Rosalía sonrió al verme y me abrazó. Cuando me aparté, la escuché decir:
—Michael, siento no haberte contado...