Perspectiva de Alejandro
—¡No, no, por favor, no la lleves! Soy el que quieres, déjala ir, ella solo es una niña —intenté suplicar, pero mis palabras cayeron en oídos sordos.
—Mírate, ¿no se supone que eres algún tipo de máquina de matar? Y aquí estás, de rodillas, suplicando. Patético —dice la figura.
—Creo...