YENEFER
Al día siguiente, Franco y yo volvimos a la mansión de los River.
_ ¿Ustedes dos tuvieron una pelea? _ Christine preguntó preocupada en el momento en que entramos.
Tomé su mano y negué con la cabeza para tranquilizarla.
_ No, abuela.
_ Han pasado muchas cosas estos últimos días. Pero no olvides...