YENEFER
Sentí la brisa cosquillear mi piel como plumas cuando la luz del sol brillaba en mi cara. Me desperté de mi sueño y escuché el tictac del reloj. Instintivamente, tomé mi teléfono, solo para descubrir que estaba apagado. Tan pronto como cargué mi teléfono, apareció un mensaje de Franco.
“Buenos...