Con cuidado, levanté a Pedro.
Parecía que no estaba completamente borracho, aún me apartó la mano con molestia.
El resultado fue que casi se cae al suelo.
Viendo que su ojo estaba a punto de rozar el borde de la mesa, lo sujeté rápidamente.
Después de asegurarme de que estaba bien, lo llevé a...