CAMILE
Me había quedado tendida en aquella cama de hotel, llorando amargamente por mi suerte.
Henry estaba vivo, ¡estaba vivo y convertido en alguien que nunca imaginé!
Cuando descubrí que se trataba de él, quise creer que todo este absurdo, solo se había tratado de una broma por haberlo dejado. Creí ver en...