HENRY
—Oh, Camile. Yo también te amo… —respondí, afianzando mi agarre a su cintura.
Ella ocultó su rostro en mi pecho y aspiró profundo para luego volver a mirarme.
—Me lastimaste… —murmuró llorando—. Me rompiste el corazón de una manera en que creo, ya no tiene remedio.
—Lo siento tanto… —respondí sincero, mientras mis...