[«¡Mira, madre! Mientras nosotras lloramos por los golpes y heridas. Él lo está disfrutando, porque esto le devolvió a la mujer que tanto ama» escribió Daniela a su madre].
[«¡No hay mal, que por bien no venga, hija! Dice el refrán, esto demuestra que de toda contrariedad, se puede extraer algo...