―¡¡¡Dios!!! ―fue la palabra pronunciada por Elian, asombrado ante la belleza de Génesis.
―¡Te felicito, amigo! Está muy hermosa tu novia ―confesó Christopher― parece salida de un cuento de hadas.
―¡¡Sí!! Estás en lo cierto. En estos días, no la voy a dejar salir de la cama ―confesó él a su jefe...