Oliver frunció el ceño y sintió una oleada de ira. Entonces, ¿esa persona sabía que Thalia era su hija y aun así la secuestró? Debía estar cortejando a la muerte.
-¿Quién es? -prácticamente gruñó, apretando las mandíbulas por la ira.
Sin embargo, no esperaba el nombre que salió de los labios de...