-¡Saquenme de aquí! ¡No pertenezco a este lugar! -Maya hizo sonar con fuerza los barrotes de la celda y el sonido resonó por todo el pasillo.
Maya había permanecido en prisión preventiva durante meses mientras esperaba la detención de su cómplice, Miriam Hopper, su madre. Sin embargo, la vida en prisión...