—... Eres tú para mí y para mi lobo.
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—¿Qué? —mi voz salió pequeña e insegura mientras miraba a Humberto, tratando de verificar si lo había escuchado correctamente.
—Ana encontró a su compañero en un hospital hace seis meses, luchando contra el cáncer. Ya estaba en la etapa terminal y, siendo humano,...