«Pues que se joda el vínculo.»
Estar envuelta en los brazos de Humberto me había traído una sensación de paz. Incluso sentí esos cosquilleos que no había sentido hacía semanas. Los famosos cosquilleos que recorrían tu cuerpo, te hacían temblar las rodillas y te daban una sobredosis de puro placer. Estar...